Hace unas cuantas semanas… el socio número 213 de la Asociación Galega de Artesáns (ese soy yo) cumplía los 35 años de su pertenencia a esta asociación…

No quería dejar pasar esa fecha sin hacer un reconocimiento expreso de la ayuda que supuso para mí entrar a formar parte de esta asociación, en aquellos momentos puntera a nivel estatal, que se convirtió en un faro de luz para los artesanos de otras regiones…

Estoy agradecido por todo lo que significó para mí, en aquellos años en los que comenzaba un proyecto personal que acabaría dando lugar al taller artesano que hoy se identifica bajo el nombre o marca de Ardentia.

Fui, durante mucho tiempo, de los jovencitos, de los que íbamos como pollo sin cabeza por las ferias de toda España, aprendiendo de otros, y de los errores propios… y hasta aquí hemos llegado…

Ahora han pasado muchos inviernos y ya soy de los “talluditos” de la asociación… Hace tiempo que son otros los que aprenden de nuestra experiencia…

Por el camino han ido cambiando mucho las cosas… Son otros tiempos, otras necesidades…

Durante este último periodo he estado en la Directiva de asociación, poniendo mi granito de arena, una vez más, con el objetivo de que AGA siga sirviendo a otros que empiezan ahora, como antes me sirvió a mí.

Estoy a punto de cerrar esa etapa, con una prórroga de mandato… ayudando a otros artesanos a recoger el testigo como futuros directivos, de manera que se sientan cómodos y con fuerza para participar de esta asociación… y que, de alguna manera, puedan dejar de lado el miedo escénico que significa trabajar para otros artesanos (tarea complicada ;-), pero necesaria), sacando tiempo de donde no lo tienes…

El asociacionismo es así…

Luis González
Artesano Creador de Ardentia
Socio 213 de AGA