Perlas orgánicas
Perlas orgánicas, naturales y cultivadas
Hoy, recordando que las perlas que utilizamos en algunas de nuestras colecciones de joyas son de cultivo en agua dulce, aprovechamos para contaros un poco más sobre este mineral tan preciado.
La Comisión de perlas de la CIBJO (Confederación Mundial de la Joyería) acaba de publicar una interesante y completa guía para clasificar las perlas naturales y perlas cultivadas. El propósito de esta publicación es el de completar el Libro de la Perla, un documento interesantísimo, publicado en abril del 2020. Este Libro contenía toda la información detallada sobre normativa, pautas de cuidados, marcas comerciales o localizaciones geográficas de los distintos tipos de perlas.
Ahora, la nueva guía detalla, clasificándolas de una manera muy didáctica, todas las clases de perlas que se pueden encontrar en el mercado, incluyendo las imitaciones y las producidas artificialmente.
Para descargar este nuevo documento (por ahora, en inglés), clicar aquí:
Guía para clasificar perlas naturales y perlas de cultivo
Bien, es el momento de contestar a dos preguntas:
¿Qué es una perla natural?
¿Qué es una perla cultivada?
Una perla natural se obtiene de unas secreciones formadas naturalmente, sin la intervención del ser humano, en el interior del molusco, alrededor de un cuerpo extraño. Estas perlas son de carbonato de calcio y conchiolina. Pueden ser anacaradas o no.
Una perla cultivada se obtiene de unas secreciones formadas alrededor de un cuerpo extraño, introducido con intervención del ser humano. Igualmente, pueden ser anacaradas o no. Se suelen cultivar en granjas especialmente montadas para un fin comercial.
Tanto las perlas naturales como las perlas cultivadas pueden ser de agua dulce (ríos o lagos) o de agua salada.
En la guía, además, detallan e ilustran con fotos las características que definen la calidad de cada perla: el lustre, el color, la apariencia de superficie, la forma, el peso y el tamaño.