En nuestro taller estamos acostumbrados a recibir visitas de todo tipo: clientes, proveedores, comerciales, etc.
Sin embargo, hoy hemos tenido una visita que nos ha encantado todavía más (que no se disguste ninguno de nuestros visitantes previos, nos ha encantado también vuestra visita).

Antes de hablar de la visita de hoy, queremos contaros que en la colección MyZoo el animalito que más éxito tiene y al que le tenemos más cariño (podemos confesarlo) es Píntega, una pequeña salamandra en plata de Ley 925, con esmalte al fuego en varias tonalidades.
Cada vez que mandamos alguna a un punto de venta no se queda expuesta más de 2 o 3 días… así que no somos los únicos en tenerle cariño…

Hoy este post va de otro reptil que nos ha visitado en el taller: una cría de salamanquesa.

No estamos acostumbrados a verlas en interiores, así que la sorpresa ha sido grande para nuestro equipo. En la foto podéis ver que el suelo de nuestro taller es verde… y lo es, en previsión de que se grabe el próximo capítulo de la Guerra de las galaxias y así ya tener el croma instalado en el suelo… ?

Fuera bromas, nuestra pequeña salamanquesa no se ha podido mimetizar con nuestro suelo y la hemos descubierto muy rápidamente.
Esta pequeña e inofensiva cría de unos 5 o 6 meses se ha portado muy bien, no se ha llevado ninguna joya ni un gramo de plata… al contrario, se habrá zampado algún insecto o araña por el taller, durante la noche.

La hemos devuelto -con mucho cuidado de no tocarla- al matorral que tenemos cerquita de la entrada y así poder seguir su vida salvaje sin trampas.

Sospechamos que se metería en el taller buscando algo de calor, pero seguramente encontrará su madriguera sin problema y seguirá pasando el invierno en ella, protegiéndose ya que su sangre fría no le permite aguantar tantos cambios de temperatura como otros animalitos…

Hemos procurado asustarla lo menos posible. Al ver la foto, se puede pensar que lo está, pero no, su ojo es así: dorado y con la pupila negra en vertical. Estaba esperando que le sacásemos la foto, inmóvil, por si acaso.
Pensamos que es una salamanquesa común: Tarentola mauritanica, un geco llamado Osga, en Galicia, pero si alguien desea ilustrarnos con cualquier comentario será bienvenido.